Nos dirigirnos a usted debido
a que nos encontramos en una cadena de dificultades que no nos permiten avanzar
en nuestro objetivo de trabajo y protección del Ambiente por el cual hemos
venido a este país.
Nosotros fuimos voluntarios
que trabajamos durante un mínimo de 6 meses en el Centro de Rescate “Los Monos
Selva y Vida”, ubicado en el Km. 2 de la vía 10 de agosto, Puyo, provincia de
Pastaza. Esta fundación Suizo-ecuatoriana nació como un centro de preservación
de la fauna y de la flora, cuyos objetivos declarados son el cuidado,
rehabilitación y liberación de animales victimas del tráfico, acogiendo
turismo, supuestamente selectivo y educativo, para su subsistencia.
Durante nuestra estancia en
el centro nos dimos cuenta de una serie de irregularidades e incumplimientos de
las normas básicas para un centro de rescate, incluyendo el manejo de los
animales, la infraestructura y también
la seguridad del sitio, ya que el centro solo consta con una hectárea de
terreno.
Por esta razón nos permitimos
mandar este informe detallando los motivos por los cuales pedimos su asesoría y
posible solución:
1)
EL
SITIO:
-El terreno se
encuentra ubicado a 10 minutos en carro de la ciudad de puyo, y cubre un área
de una hectárea, la cual es insuficiente para el numero de animales alojados.
La zona turística del centro incluye, el terreno que pertenece oficialmente al
presidente de la fundación, Yvan Bouvier, y una gran parte de zona verde
explotada por él ilegalmente.
-La propiedad
limita con el Río Chilcayacu por el cual bajan desechos de la ciudad, con un
parqueadero en donde los carros ingresan directamente desde la carretera
principal, con algunas viviendas e, inclusive
un hotel.
-Los animales
pueden acceder al parqueadero con facilidad, corriendo el riesgo de ser
atropellados y robados como ya sucedió anteriormente. De igual manera la
cercanía con las viviendas en donde trabajan vendedores de alimentos y viven
animales domésticos (gallinas y perros) atraen a los animales del centro con
riesgo de contaminación y enfermedades.
-Conflictos
personales anteriores del presidente con sus vecinos, han provocado que estos
últimos disparen en el sector poniendo en peligro a animales y voluntarios.
LAS
INSTALACIONES
-El espacio
turístico está limitado en la parte más alta por una cerca eléctrica, único
dispositivo de disuasión para que los animales no salgan. No obstante, esta
cerca no es suficiente o no funciona como debido, por lo cual los animales
pueden sin dificultad escaparse del perímetro del centro, llegando con
facilidad a la carretera principal; Vía Diez de Agosto (eje Puyo-Arajuno).
-Las jaulas, en
su mayoría, no siguen los parámetros básicos y cuentan con deficiencia de
infraestructuras para ser aptas a recibir animales selváticos: por ejemplo, los
tres Cebus apella se encuentran en
una antigua marranera, con paredes y piso de cemento y sin que la luz solar
pueda penetrar por el techo enteramente de tejas de metal. La lentitud en la
compra de materiales ha provocado que una jaula prevista para dos primates Lagothrix Poeppigii adultos, resulte
todavía sin acabar, y los animales estuvieron esperando durante siete meses en
una jaula de 9 m2 .
Algunos
encierros han revelado falta de seguridad, permitiendo que animales se
escaparan, poniendo en peligro los demás animales, humanos o interrumpiendo el
supuesto proceso de rehabilitación.
Además, el
centro no dispone de área de cuarentena, por lo cual los animales enfermos se
colocan en sitios de fortuna, inadecuados a esta función, no esterilizados o en
contacto con el exterior de donde incluso las ratas pueden ingresar.
-
La
casa principal sirve a la vez de vivienda, oficina y de espacio para acoger a
algunos animales. Por lo tanto, las áreas ocupadas para los humanos y los
animales se mezclan constantemente, poniendo en peligro la salud de los unos y
de los otros por una total falta de higiene. La transformación de algunas
habitaciones en jaulas, en principio temporáneas pero finalmente definitivas,
hacen que esos lugares no sean aptos a recibir los animales por su evidente falta
de espacio, de posibilidades de instalar juguetes y de sol. Actualmente, cinco Lagothrix Poeppigii viven en un cuarto
con un solo acceso al exterior por un balcón y llegan a ser nueve durante las
noches.
La vivienda
revela también falta de seguridad en cuanto los animales pueden fácilmente
acceder al interior de ella y robar comida humana, actividad a la que Lisa, Ateles belzebuth, se dedica varias veces
al día. Esa falta de seguridad causó graves daños el día de Navidad, cuando,
por la noche, la mayoría de los animales pudieron ingresar y destruir varios
espacios y materiales, con riesgos por su integridad.
2) EL PERSONAL
-
A
nuestra llegada, el centro contaba con cuatro guías naturalistas certificados,
una señora de la limpieza y, después de un tiempo, un cocinero. La presencia de
guías estaba garantizada todos los días, como la del cocinero, mientras la
señora de la limpieza tenía un día libre a la semana. Eso hacía que las
funciones principales del centro estaban aseguradas para personal capacitado y
con sueldo. A partir del mes de abril 2011, dos guías se fueron así como el
cocinero y la señora del servicio, dejando todas las responsables a los dos
guías que quedaron y a los voluntarios. A continuación (diciembre 2011), se
despidió abruptamente a los últimos dos guías, por supuesta falta de dinero, y
todos los encargos cayeron sobre los voluntarios.
-
Las
tareas oficiales de los voluntarios, por la mayoría extranjeros y jóvenes, son
de ayuda a las labores diarias del centro pero, al despedir a los empleados calificados,
los encargos fueron aumentando hasta incluir toda clase de trabajo: de la
limpieza de las jaulas (incluidas las de animales peligrosos) y de la casa,
hasta el mantenimiento del sitio, la guía de los turistas y el cuidado de los
animales, inclusive la intervención en caso de ataque. Además, nos vimos
obligados a suministrar los tratamientos veterinarios, inclusive una dosis
masiva de desparasitante (Febendazol) que nos negamos a proporcionar por la
falta de información fornida por el presidente de la fundación y por la
objeción de especialistas que consultamos.
Por esas razones
y debido al rechazo de la parte del presidente de aportar cualquier mejoría en
las condiciones de vida de los humanos y animales, la relación de trabajo se
interrumpió y con ella todos los procesos empezados.
-
Tras
el despido de todos los voluntarios el día 31 de diciembre de 2011, el manejo
del centro está ahora en las manos de cuatros socios de la fundación, numero
insuficiente para todas las actividades. Entre ellos, la coordinadora de los
voluntarios, su ex novio, el presidente de la fundación y su ex novia, también
tesorera de la fundación. Este equipo no carece de conflictos personales que,
anteriormente, llevaron a un enfrentamiento con armas entre el presidente y su ex
novia en presencia de algunos de nosotros (junio 2011). De la misma manera, los
voluntarios hemos sido involucrados en un
plan concebido por la tesorera de la fundación con el objetivo de
defraudar y quitar de la presidencia el actual presidente.
-
Los voluntarios, por falta de tiempo y
organización de los gerentes, no reciben ninguna clase de formación y sólo se
dedican a actividades básicas, siempre y cuando no se trate de estar en
contacto con animales debido a los numerosos accidentes ocurridos en las
últimas semanas.
Hoy día, la
ausencia de personal calificado y la insuficiencia de empleados, no garantizan
el correcto funcionamiento del centro y mucho menos el bienestar de los
animales. A prueba de esta afirmación, vienen los siguientes hechos: las comidas
se han reducido de cuatro a tres por día; la limpieza de las jaulas ha
disminuidos también, siendo inexistente en algunas jaulas; por falta de
observación los animales se escapan del perímetro del centro, inclusive los mas
jóvenes y fáciles de controlar, tanto que encontramos la nutria en el
parqueadero; no se proporciona el seguimiento adecuado a los animales enfermos
ni se cuida de todos los animales (los gatos, por ejemplo, no reciben ni
atenciones ni comida y agua). Los accidentes con los humanos afectan a los
trabajadores y la situación parece salir del control, con grave daño y peligro
para los animales, algunos victimas de autentico maltrato (gatos, Cebus albifrons de cinco meses hallado
por la policía del medio ambiente en la oficina sin comida).
3) MANEJO DE LOS
ANIMALES
- El centro
cuenta con un total de ochenta y dos animales de diferentes especies:
Primates: 16 Lagothrix poeppigii, 1 Lagothrix lagothricha, 3 Ateles belzebuth, 9 Cebus albifrons, 3 Cebus
apella, 7 Saimiri scierus, 1 Aotus vosciferans.
Carnivora: 6 Nasua nasua, 1 Lontra longicaudis. Rodentia: 2 Dasyprocta
fuliginosa. Aves: 12 loros de distintas especies. Reptilia: 10 (dependiendo
de sus fugas) Geochelone denticulata.
Animales
domésticos: 2 Felinus domesticus y 9 Canis familiaris.
Desde nuestra
llegada, numerosos animales han muerto o desaparecido pero también el centro ha
recibidos nuevos ejemplares, algunos de ellos todavía sin declarar al
ministerio.
- Todas las
especies citadas comparten el mismo territorio (una hectárea), incluyendo a los
humanos (trabajadores y turistas). En ese espacio, algunos están libres y otros
enjaulados, pero no hay ningún dispositivo de separación de interespecies. En
la casa, también, compartieron jaulas durante un largo periodo, un Ateles belzebuth macho y un Cebus albifrons hembra y siempre, los
animales domésticos, especialmente los perros, están en contacto con los demás.
Esa falta de separación de las especies ya fue causa de enfermedades
transmitidas, por ejemplo, de los Saimiris
a los Lagothrix poeppigii, por medio
de las cucarachas que los primeros comen en cantidad. De igual manera, la
cercanía entre especimenes distintos está a la origen de aberraciones de la
naturaleza, como en el caso de las relaciones sexuales frecuentes entre un
perro macho y una de los Ateles belzebuth
hembra.
- En la parte
del manejo científico, el centro cuenta
con un veterinario de confianza. Se trata de un veterinario especializado en
mascotas. Miembro de la fundación, cuyas asesorías e intervenciones son
proporcionadas gratis al centro, no así las medicinas.
Este
veterinario, fue responsable de algunos actos de dudosa índole científica,
como, por ejemplo, el hecho de no haber efectuado ninguna visita in situ, lo
cual no le permitió una observación profesional de los animales en su entorno y
su comportamiento. También suministrar en varias ocasiones tratamientos
generalizados sin tomar en cuenta las especies e inclusive las clases: este es
el caso del suministro de Metronidazol tanto a primates como a carnívora por
unos parásitos típicamente humanos (Trichomonas). Por ultimo, demostró total
negligencia en suministrar Ivermectina a las tortugas, conociéndose que es
letal para esta especie en particular, con la consecuente perdida de ocho de
los treinta individuos y sin proporcionarnos ningún tipo de solución. Y a pesar de todo, sigue siendo el
veterinario exclusivo del centro.
- Como respaldo
científico, el centro trabaja con varios equipos de biólogos de distintas
Universidades de Ecuador: los de la Universidad Central de Ecuador, que no
trabajan in situ y una estudiante de la Universidad de Cuenca, novia del
presidente de la fundación.
Esta estudiante
impuso el suministro experimental de fertilizante para mamíferos, exigiendo que
los voluntarios efectuaran el estudio, sin proporcionar ningún tipo de proyecto
ni de protocolo. Ante nuestra negativa, durante una de sus esporádicas visitas
al centro, decidió suministrar el preparado, que se encontraba cubierto de
hongos, a todos los animales de afuera. Todo esto con la finalidad de publicar
algún tipo de artículo científico. Por la misma razón, exigió, con el apoyo del
presidente, el suministro de una sobredosis de Febendazol al 10% (1 ml/2 Kg.
durante diez días), seguida por una dosis masiva y generalizada de antibiótico
(Bactrim) (tratamiento de una semana) sin previo estudio ni verificación de que
todos los animales estuvieran enfermos y basándose en un solo caso, por cierto,
no habiendo comprobado científicamente (no hubo toma de muestras posterior al
tratamiento) la recuperación del sujeto, repitiendo los tratamientos después de
21 días.
- El centro no
cuenta con un seguimiento técnico profesional: existen modelos de fichas de
ingreso y médicas para los animales, pero no se rellenan ni se ponen al día.
Todo se apunta de manera informal en una libreta o en el diario establecido por
iniciativa personal de los voluntarios y que, por lo tanto, queda interrumpido
desde el momento del despido.
- No
se comunica el plan de manejo a los que trabajan con los animales y todo se
aprende sobre la marcha.
El centro carece
de los siguientes protocolos:
Plan de manejo:
o
Alimentación:
no variada, alimentos cocinados, poca fruta del sector (la mayoría proviene de
la sierra), se guarda en un lugar con acceso directo a plagas.
o
Crianza:
ninguna clase de información o formación a la crianza de los animales; toda la
formación se realizó por monto propio, sin el aporte educativo de la gerencia.
o
Salud:
ausencia de cuarentena, clínica, veterinario capacitado in situ.
Protocolo
de seguridad:
o
No
existe un dispositivo para la
delimitación del terreno.
o
No
existe un plan anti-incendio ni un plan de emergencia en caso de catástrofes
naturales.
o
No
existe un protocolo en caso de fuga o ataques.
Estamos urgidos por los
animales más vulnerables y por el futuro de todos ya que, tras dirigirnos al
Ministerio del Ambiente de Pastaza y constatando ellos el estado actual del
centro, no se ha logrado ningún tipo de resultado, por el contrario, hemos sido
bloqueados en nuestros intentos.
Por lo tanto, nos dirigimos a
Usted en la espera de un asesoramiento o inclusive enviando a un representante
de Quito que constate lo aquí relatado.
De antemano le agradecemos su
interés y permanecemos a su entera disposición para cualquier aclaración.
Le enviamos nuestros más
cordiales saludos,
alguna información de como se encuentra la fundación actualmente.
ResponderEliminardatos de algun voluntario?
Atentamente
Gabriela Valencia Vargas